EL BALONMANO, LA SECCION MAS REPRESENTATIVA DEL AT.MADRID

El balonmano es la sección más importante y representativa de la historia del Club Atlético de Madrid. En febrero de 1947, Juan Touzón, presidente rojiblanco, fundó la sección de balonmano del At.Madrid. El club prestó especial atención al balonmano desde sus inicios. Cesáreo Galíndez, máximo dirigente colchonero entre junio de 1947 y junio de 1952, potenció los deportes amateurs en la entidad, entre ellos, el balonmano. Además, destacó la figura de Jorge Hernández Bravo, auténtico alma mater de la sección. En aquellos primeros años, el Atlético de Madrid contaba con un equipo de balonmano a siete y otro de a once; no obstante, el segundo de ellos desapareció a mediados de los años 50.

En 1949, el At.Madrid conquistó su primer Campeonato de Castilla de balonmano a once y perdió la final del Campeonato de España ante el Barcelona. Más tarde, los éxitos llegaron en la modalidad de balonmano a siete. El conjunto madrileño se adjudicó el Campeonato de España en 1952 y 1954. A partir de entonces, el B.M.Granollers desplazó al Atlético del reinado del balonmano español durante varios años.

En el verano de 1960, el At.Madrid fichó a Domingo Bárcenas como entrenador del equipo. Los éxitos no tardaron en llegar. En la temporada 61/62, el Atlético conquistó el primer doblete de su historia: Liga y Copa. Los rojiblancos repitieron el título liguero en la siguiente campaña. Además, el conjunto madrileño logró dos Ligas más (63/64 y 64/65) y una Copa (65/66). Incluso, la escuadra de Bárcenas rindió a notable nivel en Europa toda vez que alcanzó los cuartos de final de la Copa de Europa en la temporada 62/63. Los presidentes colchoneros, Javier Barroso y Vicente Calderón, apoyaron el balonmano durante aquellos brillantes años. La sección había logrado su indiscutible consolidación en el seno de la entidad rojiblanca.

Al término de la campaña 65/66, Domingo Bárcenas dejó el At.Madrid para centrarse en su labor como seleccionador nacional. El Atlético acusó la marcha de Bárcenas ya que durante cinco años desfilaron varios entrenadores. El Granollers arrebató al At.Madrid la supremacía del balonmano nacional. Aun así, el conjunto madrileño conquistó dos Copas (66/67 y 67/68).

En abril de 1971, el club incorporó a Juan de Dios Román como entrenador del primer equipo y coordinador de la sección de balonmano. Juan de Dios comenzó a reestructurar una sección que llevaba estancada varios años. El técnico emeritense centró su proyecto en tres grandes ejes: el trabajo coordinado de la cantera, la estructura piramidal de los equipos y la cancha de Magariños. Los inicios no resultaron nada sencillos, pero Vicente Calderón confió ciegamente en el trabajo de Juan de Dios. Los rojiblancos rozaron la Liga y la Copa, mas no podían con el insuperable Granollers. Entonces, en el verano de 1974, Juan de Dios Román decidió seguir como coordinador de la sección al mismo tiempo que nombró al búlgaro Stefan Milev como entrenador del primer equipo. Milev cumplió dos aceptables campañas, e incluso acarició la Liga y la Copa en la segunda de ellas, sin embargo no pudo superar al pujante Calpisa.

En la temporada 76/77, Juan de Dios Román volvió a asumir la dirección técnica del primer equipo. Los frutos de varios años de trabajo se vieron reflejados. En 1978, el Atlético se adjudicó la Copa del Rey; los rojiblancos no ganaban un título desde 1968 cuando conquistaron la Copa del Generalísimo. En la siguiente temporada, el At.Madrid obtuvo un histórico doblete: Liga y Copa. El Atlético de Madrid iniciaba los mejores años de su vida. Desde 1980 a 1985, los rojiblancos sumaron 4 Ligas (80/81, 82/83, 83/84 y 84/85) y 2 Copas (80/81 y 81/82), además de alcanzar la final de la Copa de Europa en 1985, primer equipo español en conseguirlo. Incluso, el conjunto de Juan de Dios Román estableció un récord histórico: 70 partidos sin perder en la Liga desde la temporada 82/83 hasta diciembre de 1984. El Atlético de los Cecilio Alonso, Rico, Novales, López León, Reino, Chechu, Juanon de La Puente, Milián, Parrilla, etc. dejo una huella imborrable en el balonmano español y europeo.

A la finalización de la temporada 84/85, Juan de Dios Román anunció su marcha del club para dirigir a la selección española. El novel Jordi Alvaro asumió la dirección del At.Madrid. El equipo madrileño siguió en la élite durante dos temporadas más en las que consiguió una Copa del Rey (1987), una Supercopa de España (1986), un subcampeonato de Liga (1986), un subcampeonato de la Copa I.H.F. (1987) y unas semifinales de la Copa de Europa (1986).

En junio de 1987, Jesús Gil accedió a la presidencia del At.Madrid. Desde entonces, la sección de balonmano perdió categoría de forma paulatina. Aquel mismo verano, Lorenzo Rico y Cecilio Alonso se marcharon al Barcelona que iba a reemplazar al Atlético como nuevo amo del balonmano nacional. Después de tres irregulares temporadas, Jesús Gil contrató a Juan de Dios Román para que relanzase la sección. El club apostó por el balonmano, no obstante los títulos no llegaron en la campaña 90/91 (2º en la Copa y 3º en la Liga). En la temporada 91/92, el equipo partió con el objetivo de conseguir algún título, pero la inestabilidad presidió la sección desde que Jesús Gil anunciase que el balonmano podría desaparecer con la transformación del club en Sociedad Anónima Deportiva en junio de 1992. Entonces, Juan de Dios Román dimitió como entrenador y Parrilla terminó la campaña con un digno tercer puesto liguero. El 9 de mayo de 1992, el At.Madrid jugó su último partido oficial. Jesús Gil cedió los derechos de la sección a un Comité de Supervivencia. Dicho Comité junto al B.M.Alcobendas crearon el At.Madrid-Alcobendas.

El At.Madrid-Alcobendas deambuló con más plena que gloria durante dos temporadas. Las deudas, las denuncias y los malos resultados deportivos marcaron este triste epílogo del balonmano rojiblanco. En mayo de 1994, el At.Madrid-Alcobendas desapareció.

Por otra parte, el At.Madrid también contó con un equipo femenino de balonmano en dos etapas. Desde 1952 a 1956, las féminas rojiblancas lucharon sin éxito por el Campeonato de España de balonmano a siete. En la temporada 70/71, el balonmano femenino retornó al At.Madrid. Las rojiblancas rindieron a notable nivel ya que se adjudicaron cinco Ligas españolas (1971, 1972, 1976, 1977 y 1978). Al inicio de la campaña 79/80, el club anunció la disolución del equipo por motivos económicos.