Día a día, mi interés por la información deportiva muere y muere. El fanatismo, la falta de rigor, el poco respeto a los otros deportes (para la mayoría sólo existe el fútbol) me alejan irremediablemente de la prensa deportiva española del siglo XXI.
Si leo un periódico deportivo, suelo pasar por alto no menos de 25 páginas que están llenas de tonterías, bobadas y noticias sin ningún interés. Directamente, paso a leer las informaciones polideportivas. No se puede leer un periódico deportivo que tenga rigor, credibilidad, imparcialidad y objetividad. Es todo fanatismo y vender la moto.
Y en la radio, todavía peor pues el fanatismo llega a su máximo cenit con las dichosas tertulias. En ellas los periodistas se convierten en furibundos hinchas que atacan al rival y defienden a capa y espada a su equipo.
Mientras tanto, pocos, muy pocos, son capaces de investigar, denunciar y contar todas las tropelías que los Giles y los Cerezos están cometiendo en el Atlético de Madrid. Ellos se dedican a hablar de si Piqué tiene novia, de si Cristiano lleva 24 goles o 23, de si los árbitros son de un equipo u otro, y así de infinitas tonterías semejantes.
Espero que algún día la prensa deportiva española vuelve a ser como antes. Os invito a leer periódicos deportivos de los años 60, 70 o 80, veréis la enorme diferencia. Y no digo nada si os acordáis del genial José María García quien tiene algo que casi ninguno actuales periodistas tiene. Credibilidad. Si García daba una noticia, todos sabíamos que era cierta 100%. Y ahora ...